Con el crecimiento del sector turístico en Colombia y la alta demanda de alojamiento, el uso de plataformas como Airbnb es mayor. No obstante, se presentan problemas en torno al alquiler de viviendas turísticas en zonas residenciales, al no ser reguladas de manera adecuada.
Dilemas del alquiler de viviendas turísticas en zonas residenciales y cómo afrontarlos
Estos son algunos problemas de convivencia y seguridad en espacios residenciales que se generan por falta de regulación en el alquiler de viviendas turísticas.
Las herramientas tecnológicas pueden desempeñar un papel crucial en la promoción de una experiencia de alquiler fluida tanto para los propietarios como para los inquilinos.
"El crecimiento del turismo en Colombia ha generado oportunidades, pero también desafíos en el arriendo de viviendas turísticas en conjuntos residenciales, afectando la calidad de vida de los residentes y la seguridad en estos espacios", mencionó Daniel Laverde, gerente comercial de Properix.
Riesgos presentes con el alquiler de viviendas turísticas en zonas residenciales
En materia de seguridad, los edificios de la zona residencial pueden no estar preparados para este tipo de operaciones, lo que podría generar inconvenientes con las puertas de seguridad e incluso en el control de acceso entre pisos. Lo anterior, propiciaría robos u otros delitos.
Por otro lado, los comportamientos indebidos como altos ruidos, consumo excesivo de alcohol y conductas inadecuadas por parte de los huéspedes de las viviendas turísticas, generan incomodidad entre los residentes.
No obstante, este tipo de arrendamiento debe estar contemplado en el manual del conjunto residencial, por lo que, si un propietario utiliza su propiedad para este fin sin que esté establecido en el reglamento, podría enfrentar sanciones relacionadas con la propiedad horizontal por incumplimiento de sus obligaciones.
¿Cómo podría regularse el alquiler de viviendas turísticas?
Pese a que no hay una norma frente al uso y arrendamiento adecuado de viviendas turísticas en edificios de uso residencial, la legislación colombiana promulgó la ley 2068 de 2020 y el decreto 1836 de 2021, los cuales exigen que todas las viviendas de este tipo estén debidamente inscritas en el Registro Nacional de Turismo y, además, cumplan con todos los requisitos de seguridad y urbanísticos.
Ante esto, Laverde expresó: “es preocupante que muchas viviendas no estén registradas y no cumplan con los requisitos legales mínimos. Esto deja a los residentes permanentes de estos edificios o conjuntos en una situación difícil, obligándolos a buscar soluciones por sus propios medios para salvaguardar su seguridad y la de sus familias”
En este sentido, una regulación adecuada y el respaldo de soluciones tecnológicas pueden mejorar la calidad de vida significativamente y reducir los riesgos a los que están expuestos los residentes.
Algunas herramientas tecnológicas se encuentran enfocadas en la administración y gestión de propiedades, por lo que permiten el control de accesos, una comunicación efectiva, una resolución rápida de reclamos y una organización eficiente de asambleas. Esto posibilita la creación de un entorno seguro y armonioso para todos los residentes.
“La tecnología proporciona herramientas innovadoras que facilitan una comunicación efectiva en los conjuntos residenciales, posibilitando una conexión instantánea y una gestión más eficiente de las necesidades comunitarias. Además, estas soluciones ofrecen una experiencia de alquiler fluida y armoniosa tanto para propietarios como para residentes y visitantes", finalizó.
Temas relacionados