En lo que hace al manejo de ropa blanca y uniformes de trabajo en hoteles, restaurantes, hospitales y otras instituciones, la última novedad referente a la optimización de esta tarea se relaciona con el uso de etiquetas con tecnología inalámbrica RFID.
La sigla RFID significa Radio Frequency Identification, es decir, identificación por radiofrecuencia. Consiste en un sistema de almacenamiento y recuperación de datos mediante el uso de dispositivos, tales como etiquetas o tarjetas.
Así, a cada objeto se le adhiere o incorpora una etiqueta o tarjeta con un número de serie único y antenas, que permiten que la información específica pueda transmitirse por ondas de radio a un receptor RFID conectado a un software, en el cual se visualizan los datos actualizados de la pieza en cuestión.
Este sistema se presenta como una alternativa para la identificación automática de objetos. A diferencia de los tradicionales códigos de barras, las etiquetas/tarjetas RFID son reprogramables, por lo cual pueden pasar de un objeto a otro cuando uno de estos queda en desuso.
Esta tecnología cumple diversas funciones, ya que también es tenida en cuenta en sistemas de logística de productos.
Gestión de lavandería con etiquetas electrónicas
USO DE ETIQUETAS ELECTRÓNICAS EN LAVANDERÍA.
Para utilizar este sistema en lavandería, lo que se hace es colocarle a cada prenda una etiqueta RFID. Estas etiquetas deben estar diseñadas de forma tal que puedan soportar los procesos de lavado a los que son sometidas habitualmente. Por lo general, la vida útil de las etiquetas es superior a la de las prendas, por lo que son reutilizables.
Las etiquetas se adhieren a las prendas de diferentes maneras. Se pueden coser a las mismas, esconder en un dobladillo o, incluso, termosellarlas.
Una de las firmas que desarrolla este sistema en el país es Iraola y Cía: "La tecnología RFID permite contar las prendas de forma automática en tiempo real al pasar por un portal que las identifica. Por ejemplo, se pasa con un carro lleno de ropa por el portal y al instante aparece en una pantalla cuántas prendas hay, discriminando por categoría: cuántas sábanas, toallas, uniformes, etc. Es capaz de contar hasta 500 prendas en pocos segundos", explicó Javier Pilotti, ingeniero de la compañía.
En su opinión, el control de ropa blanca y uniformes de trabajo mediante este sistema ofrece las siguientes ventajas:
• Disminución de costos en ropa blanca e incremento en la eficiencia de su uso.
• Menor cantidad de fugas y mermas de prendas por robo o extravío.
• Control histórico de cada prenda, lo cual ayuda a la toma de decisiones sobre la continuidad de uso, en base al número de relavados.
"Son muchos los hoteles, hospitales y sanatorios que alquilan la ropa blanca y tercerizan el lavado. En estos casos, el control adquiere una relevancia mayor", concluyó Pilotti.
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